08 septiembre 2008

Muñecos a cuerda

Desde un punto de vista matemático el destino existe. Seguro que te sorprende que diga esto, pero lo he estado pensando y he llegado a esta conclusión. En realidad todo esto, todo lo que somos y todo lo que nos rodea, no es más que una combinación matemática de materia, tiempo y energía. No sé como empezó todo esto, no sé quién puso la primera piedra, pero una vez sucedió, todo lo demás ya estaba decidido.

Simplificándolo mucho es como si fuéramos muñecos a cuerda. Alguien nos da cuerda y nos deja sobre una superficie. A partir de ese momento ya todo está decidido, todo está estipulado por complejas fórmulas matemáticas, hay un millón de factores que influyen, pero todos son hipotéticamente predecibles.

Pero la verdadera realidad humana todavía es infinítamente más compleja que en este ejemplo, combinaciones de ADN, la gravedad en cada punto, las condiciones meteorológicas..., ¡son tantos los factores que influyen! Pero sí. Todo está decidido. Desde que alguien nos dio cuerda.


Guardia Real. Atenas 2008.

4 comentarios:

FILO dijo...

Y HAY A QUIENES LES DIERON CUERDA PARA RATO: FRANCO, HITLER, MUSOLINNI, FIDEL, PINOCHET PERO ANTE TODO QUE A LUIS COBOS NO LE VUELVAN A DAR NI CUERDA, NI PILAS NI ENERGIA RENOVABLE.

Naftor dijo...

Que manera mas triste de mirar la relidad, sinceramente.

¿Que es cierto lo que dices? No tengo los conocimientos ni el interes para decirte que si o que no. Sólo sé que tomarse la vida de tal manera en que tu solo seas la repercusión de algo anterior y el creador de la siguiente me parece triste.

De todas formas, enorabuena por el blog.

musogato dijo...

Es que el destino, si existe, es triste. Por eso no quiero creer en el.

Anónimo dijo...

hola musogato el destino es triste segun desde el punto de vista en que se mire, y si no mirame a mi y piensa en todo lo que me esta pasando y me ha pasado y si me ha encantado todo lo que comentas y el modo en que o como lo expresas, pero yo te digo que el destino uno nunca puede llegar a conocerlo y lo mismo que te da tristezas tambien te trae o da alegrias, un saludo de un colega y amigo.