16 marzo 2009

El tiempo

Debe ser uno de los temas de conversación más socorridos de la historia. La gente cuando no sabe de que hablar pues habla del tiempo. ¿No te ha pasado nunca el encontrarte con tu vecino en el ascensor y no saber que decir? En esta y en otras mil circunstancias similares, hablar sobre el tiempo puede servir para romper el hielo y sacarte de una situación algo embarazosa.

- ¡Vaya día hace hoy!
- Sí, ha salido un día de perros, parece que haya vuelto el invierno.

Normalmente esto te ocurrirá con personas con las que tienes poco en común, con las que en realidad tienes muy poco, o nada, que decirte, o a las que apenas conoces. Este tipo de conversaciones tienen cero puntos, porque no aportan nada a la sociedad, ni a la evolución de la especie humana. Se trata sólo de ser educado, pues en realidad, en situaciones como ésta, lo más sincero sería quedarse callado, no decir nada.

Y todo esto te lo vengo a contar porque yo, aquí, la semana pasada, te hablé del tiempo. Y lo último que desearía que pensaras es que se trataba de una conversación de cero puntos. Utilicé el tiempo como una forma metafórica de exteriorizar extraños estados emocionales internos que me serían muy difíciles de describir de otra manera. Seguro que ya lo sabías, pero aún así quería asegurarme de que esto quedaba claro. Ya lo he dicho en más de una ocasión, aquí, en este blog, gran parte del contenido que quiero expresar está escrito entre lineas. Y en el post de la semana pasada el 100% del contenido estaba expresado de esta manera.

2 comentarios:

FILO dijo...

Y EL CAMBIO CLIMÁTICO HA HECHO QUE SEA MÁS FÁCIL ROMPER EL HIELO EN UN ASCENSOR CON TU VECINO. Y PEDAZO DE TEMA PARA ACOMPAÑAR AL TIEMPO, SI SEÑOR.

musogato dijo...

Si Filo, no hay nada como un temazo de estos para compensar cuando la inspiración flojea, jaja! Gracias.